Hotel Diego de Almagro

Más sobre este Patrimonio Nacional: Hotel Diego de Almagro

En el caso del hotel, hay tres salones de reuniones, con capacidad para albergar hasta 130 personas, están al servicio de la actividad ejecutiva. Para reuniones V.I.P. existe el "Salón Rivas", cuya decoración recuerda las Galas de fines del siglo XIX y está muy bien manteido (cada detalle), además de otros 3 salones de mayor capacidad. Es un hotel 4 estrellas y entre sus servicios se distinguen:
Servicios:
• Estacionamiento
• Piscina
• Ventanas anti-ruido
• Caja de seguridad
• Aire acondicionado
• Teléfono
• Servicio de lavandería
• Salón de reuniones y eventos
• Restaurante
• Habitaciones no fumadores
• TV cable
• Gimnasio

Por mi parte, yo visité el hotel. En general se ve exactamente igual que otros hoteles, impresiona lo amplio de sus instalaciones y la cantidad de pisos que tiene, estando ubicado en el centro mismo de la capital (esto sumado a lo acogedor del lugar, donde hay buena temperatura, sin ruido ambiental y muy tranquilo).

Por otro lado, averiguando los precios, el hotel Diego de Almagro es bastante caro, pero se justifica por todos los servicios que presta.

Finalmente, refiriendome específicamente al Palacio Rvias que es lo que queda del Patrimonio nacional, puedo decir que tenía un estilo renacentista, cargado de detalles por todas partes. Para mí, es una pena que se haya perdido todo el PAtrimonio como tal, ya que, estando tan bien ubicado, podría haber sido una atracción turística y cultural muy importante. Sin embargo, el nivel de mantención que ha tenido el hotel como tal es de gran calidad incluso tomando en cuenta que esta sala aún se usa para conferencias.

Hotel Diego de Almagro

El hotel Diego de Almagro es la reconstrucción del Palacio Rivas, el cual es un patrimonio nacional. Actualmente este hotel sólo contempla un salón original del Palacio Rivas dentro de sus instalaciones. En general, el hotel Diego de Almagro esta ubicado en el barrio cívico de la ciudad de Santiago, diseñado especialmente para preservar el Palacio Rivas y equipado para el mayor agrado del hombre de negocios, seminarios y el viaje de placer.

Este palacio fue construido en 1887 por el arquitecto Eduardo Provasoli. Fue declarado monumento nacional el 11 de Julio de 1983, por el decreto Nº622 y está conservado en excelente estado.

El programa que describiré acontinuación habla sobre cuáles eran los planes de contrucción del palacio: Éste, contempla el funcionamiento de la vivienda y la actividad vitivinícola, construyéndose una bodega en el subterráneo de 1780 metros cuadrados, primer piso destinado a actividades comerciales con 2260 metros cuadrados, segundo piso, área de vivienda, sectores de convivencia y dormitorios, destacándose una gran escalera de mármol. El primer piso expresa altos vanos en arcos de medio punto simulando un portal. En el segundo piso, hay frisos, medallones, fronteras con gran tratamiento en tallados y columnillas jónicas. En la fachada principal, hay juegos de pilastras y columnas que marcan el acceso. Cánones renacentistas de influencia taliana, marcan con rigor lo jónico y lo corintio.

Así era el programa del Palacio antes, hoy solo queda un salón con características muy similares a las que allí se especifican.

Está ubicado en un barrio muy transcurrido, por lo que el hotel es muy visitado: El barrio Cívico,donde todas sus

construcciones son de corte modernista y de gran altura homogénea (los edificios de los ministerios en promedio tienen 12 plantas) y muy estructurado. La mayoría de sus construcciones son destinadas a instituciones estatales y el comercio es escaso.

Palacio La Rioja

¿Qué es el patrimonio cultural de un pueblo?
Es el conjunto de todos los bienes, materiales (tangibles) o inmateriales (intangibles), que, por su valor propio, deben ser considerados de interés relevante para a la permanencia de la identidad y la cultura de un pueblo.

Es toda la herencia como fortalezas, castillos, templos, casas o plazas. Es más dentro de todo esto podemos incluir a:

• Pinturas
• Esculturas
• Artesanías
• Literatura
• Música
• Folclore
• Idioma
• Costumbres

Historia:

Todo se remonta a 1536 con la llegada de Diego de Almagro al Valle de Peuco (hoy Viña del Mar), el cual, por una serie de situaciones el palacio pasa a llamarse Palacio de las Viñas de la Mar.

En la época de la independencia, la hacienda de las Viñas de la Mar pasa ha ser propiedad del Abogado Juan Antonio de la Carrera, primo hermano de los padres de la patria, quien reemplazará los viñedos por plantaciones de trigo.

Posteriormente, estos terrenos tendrán como propietarios a la familia integrada por Mercedes Álvarez y José Francisco Vergara, quienes tendrán allí hasta 1906 su casa patronal, la cual será gravemente afectada por el fuerte movimiento sísmico de ese año.

La propiedad es vendida a un inmigrante alemán, quien ese mismo año se la venderá a un próspero comerciante porteño de origen hispano llamado Fernando de Rioja.

Así parte la construcción del palacio Rioja - dicho sea de paso la primera edificación de este tipo con cuarenta hectáreas dedicadas a jardines- en estos terrenos entre los años 1906 y 1910, coincidiendo su inauguración en el marco de las celebraciones del Primer centenario de la Independencia Nacional.

El Palacio Rioja fue construido por el arquitecto portugués avecindado en Francia, Don Alfredo Azancot Levi, quien se inspiró en las obras de Auge Gabriel, tales como El Petit Trianon y el Opera de París.

En 1978 bajo la administración del Alcalde de la época, Don Raúl Herrera Aldana, se inician las obras de restauración del edificio con la finalidad de abrirlo como museo.

El Palacio Rioja es destinado, mediante decreto alcaldicio, como Museo en 1979 y finalmente como Monumento Nacional en 1985.

Personalmente, creo que este palacio es un excelente patrimonio cultural, el cual está muy bien mantenido y psee características de varios estilos arquitectónicos. Por otra parte, encuentro que el financiamiento debiera ser estatal.

Datos prácticos:

Se ubica en Calle Quillota, Entre 3 y 4 Norte, Viña del Mar

Dadas sus características se enmarca dentro de la tendencia neoclasicista francesa. En sus jardines se destacaban especies nativas de China, Brasil, Islas Norfolk, Australia, Japón etc. El inmueble consta de 1.620 metros cuadrados construídos

El palacio esta compuesto por dos plantas o niveles, el inferior (ocupado desde la década de los `80 por las oficinas y salas del conservatorio Izidor Handler) originalmente era el área de servicios como cocina, generador eléctrico, calderas -que incluso alimentaban un sistema de calefacción central- y algunas dependencias para el ocio de la familia rioja y sus invitados. En el nivel superior la planta principal concentraba los salones de la gran actividad social tan típica de belle epoque y los aposentos de la familia.
En términos de estilo, la fachada de palacio rioja es propia de los conceptos de la corriente clasicista francesa de principios de la centuria recién pasada, compuesta como hotel francés, o villa, con un cuerpo inferior de basamento fuertemente foseado (las hendiduras horizontales) y con uno superior de orden dórico. En el frente se observa una escalera imperial (de dos rampas) que desemboca en una agrupación de columnas o peristilo semicircular que hace las veces de pórtico.

Se ha impulsado un programa sostenido en distintas líneas de preservación, como capacitación museológica del personal del Palacio; conservación preventiva y mantención general del inmueble, que incluye la instalación de filtros ultravioleta en sus ventanales; restauración de los cortinajes; y el registro automatizado de sus colecciones.

Todo lo anterior se complementa con el Programa de Educación Patrimonial “Pasos”, que organiza y desarrolla talleres-visitas diseñados especialmente para revelarle a estudiantes y profesores la información y significado que contienen el edificio y sus colecciones. En definitiva, se pretende que la gente cuide y valore este edificio de gran valor patrimonial, en forma amena y participativa, haciendo de su visita una experiencia grata y memorable.

En este caso, la mantención y el cuidado del lugar son ejercidos por la municipalidad de Viña del Mar.

Ley Valdés:

La Ley de Donaciones Culturales, más conocida como “Ley Valdés”, es un mecanismo legal que estimula la intervención privada (empresas o personas) en el financiamiento de proyectos artísticos y culturales, entregando a los particulares la opción de decidir ellos mismos donde colocar sus impuestos.

El Fisco aporta un 50 por ciento del financiamiento, al renunciar al cobro de ciertos tributos, y las empresas privadas o los particulares financian, de sus arcas, el otro 50 por ciento. (Según www.culturalcurico.cl/patrocinio/leyvaldes.htm).